“Al pensar en el mensaje que nos puede unificar como Familia Salesiana en
este año 2021 es imposible no tener en cuenta que desde hace muchos meses, en
mayor o menor medida, el mundo, las naciones, todas están, si no paralizadas
(aunque muchas sí), ciertamente bloqueadas», señala el Rector Mayor en el texto
de presentación del Aguinaldo.
Al mismo tiempo, “nuestro mensaje subraya y enfatiza que, ante esta
realidad dura, dolorosa y de pesantes consecuencias, seguimos expresando
nuestra certeza de que nos mueve la esperanza, porque Dios en su Espíritu sigue
haciendo ‘nuevas todas las cosas’”.
Ilustrando la estructura del mensaje del Aguinaldo, don Ángel Fernández
Artime, subraya que el mismo Don Bosco vivió tantas situaciones duras –incluida
una epidemia de cólera– sin por ello perder la esperanza, más aún, reaccionando
siempre y motivando a los otros a actuar.
Este tiempo
presente, por tanto, es tiempo oportuno para tomar consciencia y empeñarse
delante a todos, también por lo que antes de la pandemia no iba bien, pero a lo
que a veces uno se había acostumbrado: el sufrimiento de tantas personas, las
epidemias y otras enfermedades menos anunciadas, y los daños a Dios Padre.
Es así que el Aguinaldo servirá para proponer una lectura salesiana del
tiempo presente, para encontrar procesos alternativos a la cultura dominante
para realizar un cambio de valores y de visión. Y para mantener la concreción
salesiana, propondrá, al mismo tiempo, lugares y situaciones donde “aprender y
ejercitar la esperanza».
Todo esto, dejándose siempre acompañar por María “Madre de Dios, Estrella
de la Esperanza”.
D. Ángel Fernández Artime
Rector Mayor